miércoles, 30 de septiembre de 2009

10 nombres de grupos con resonancias fílmicas


1 – Duran Duran

Duran Duran era un personaje de “Barbarella”, aunque no sé decir sin recurrir a Wikipedia si se trataba del revolucionario que interpretaba David “Profondo Rosso” Hemmings. Lo que tengo seguro es que no era el ángel ciego, pues éste se llamaba Pygar. “Barbarella”, sin ser una buena película, tiene más méritos de lo que la gente cree.

2 – The Killers

Me hubiese gustado creer que el nombre de este grupo es un homenaje a “Forajidos”, de Robert Siodmak, que partió del cuento “Los asesinos” de Hemingway para crear la secuencia inicial de un clásico del cine negro. Pero la verdad es más prosaica y menos cinéfila: “The Killers” es el nombre de una banda imaginaria que aparece en un videoclip de New Order.

3 – Heaven 17

Ahora que se va a reestrenar en cines “La naranja mecánica” (algo que hubiese sido normal en décadas pasadas pero resulta llamativo ahora, en plena época dorada del cine en formato doméstico), bueno es recordar que este olvidado grupo ochentero quiso hacer real una de las bandas imaginarias citadas por Alex cuando iba a ligar a las tiendas de discos. ¡Tiendas de discos en el futuro! ¡Qué malos profetas son los creadores de CF!

4 – Pulp

Muchos habrán visto la sombra de Tarantino en el nombre de la banda de Jarvis Cocker, pero no olvidemos que las raíces de Pulp se remontan al año 78, cuando Quentin tenía sólo 15 años, y que Mike Hodges sacó brillo al thriller made in UK con “Get Carter” (“Asesino implacable”) y la referenciada aquí “Pulp” (“Historias peligrosas”), ambas con Michael Caine, aunque su estrella quedó empañada para siempre por haber rodado “Flash Gordon” para Dino de Laurentiis.

5 – Satyricon

Esta tenebrosa banda noruega de black metal se fijó en los aspectos decadentes y oscuros del clásico de Federico Fellini, considerado injustamente un hito del cine gay a la altura de las filmografías de Kenneth Anger o Derek Jarman, cuando la verdad es que su visión de la homosexualidad es más bien negativa. Además, sigue estando por encima de esas imitaciones flojillas (pero aun así curiosas) creadas por Pasolini en su “Trilogía de la vida”.

6 – Fine Young Cannibals

“All the fine young cannibals” fue un melodrama de la MGM que pretendía llevar a la pantalla la confusión sexual de la generación beat, con Robert Wagner incorporando a un trompetista mujeriego con mucho de Chet Baker y George Hamilton a un marido engañado. Pero, sin embargo, su única opción a la gloria fue dar nombre al trío ochentero que, con cuatro acordes simplones y el falsete de Roland Gift, hizo de “She drives me crazy” prueba palpable de que verdaderas tonterías musicales pop pueden dejar una huella más profunda en la cultura que todos los sesudos experimentos de la vanguardia post-Darmstadt.

7 – The Walkabouts

Quizá me equivoque en creer que la depresiva banda de Seattle rindió un tributo al maravilloso debut en solitario de Nicolas Roeg, pero me da igual. Esa odisea de la inocencia en pleno outback australiano, con imágenes memorables, Jenny Agutter bañándose desnuda en un lago y un punto enigmático que la edición española estropea subtitulando las palabras del aborigen, nunca traducidas en el estreno original, merece todos los homenajes, incluso los de grupos que no me hacen mucha gracia.

8 – The Damned

Que una de las bandas señeras del punk rock tomase su nombre del título anglosajón de “La caída de los dioses”, clásico del homoerotismo nazi con el cual Luchino Visconti inauguraba sin quererlo un pintoresco subgénero continuado con pelis como “Salón Kitty”, “Tren especial para Hitler”, “La esvástica en el vientre” o “Ilsa, la loba de las SS”, sería, en caso de ser cierto, una ironía, en efecto, bastante punki.

9 – White Zombie

Nunca le vi nada a este grupo salvo su referencia a “La legión de los hombres sin alma” de Victor Halperin, pero con el tiempo me sorprendería la reconversión de su líder, Rob Zombie, en el director de películas como “La casa de los 1000 cadáveres”, “Los renegados del diablo” o el remake de “Halloween”. Algo me hace ver aquí el sueño de toda una vida al fin cumplido.

10 – Black Sabbath

Si hacía falta alguna otra razón para amar a la banda de Tommy Iommi y Ozzy Osbourne, ahí va: ¡les gustaba Mario Bava! Ver en alguna sórdida sala de los suburbios de Birmingham esta película (llamada entre nosotros “Las tres caras del miedo”), que, en su episodio “La gota de agua”, asustó en su día al firmante de estas líneas, debe predestinar para toda una vida dedicada al más sobrenatural rock duro.

sábado, 26 de septiembre de 2009

Flashback: Loco por tus huesos (Capítulo XXXVIII)


En las mazmorras del Santuario de Soto, el verdadero inspector Tanner inicia sus confesiones bajo la brutal presión de un desquiciado Boris, que ha vuelto a revivir todos sus traumas. Ada, dice, lo sedujo, anuló su voluntad con sexo salvaje y drogas duras, le convenció de que en la familia Valli anidaba el demonio y de que la humanidad entera corría peligro si ellos no actuaban. No se trataba de un plan descabellado en una época en que la gente creía en el Triángulo de las Bermudas y en la influencia maléfica de las manchas solares, por no hablar del reciente estreno de “La profecía”. Espiando a Eva, la señora Valli, comprobaron que, en efecto, llevaba la imagen de Satán tatuada en torno al ombligo, y que extrañas sombras acudían a su llamada durante su supuesto período de luto por la muerte de su marido, Bertrand, decapitado en El Cairo por las aspas de un helicóptero.

No muy lejos de las mazmorras, Franz halla al Arlequín fugitivo agonizando sobre el damero dorado de las baldosas. Tras la máscara no se halla otra que Noëlle. Aterrorizada, ella murmura: “me hice... de ellos... para librarme de ti... y de lo que vi aquella noche... y luego ni siquiera eres de los nuestros... déjame ver tu tatuaje...” Pero un certero disparo le hace callar para siempre, y de todas maneras Franz ya no es el mismo que fue entonces.

En la finca de Geller Bach en Arcadia, bajo la atenta vigilancia de la Milicia Arácnida, Tobías aprende a besar a Ada. Nada le ha gustado tanto en su vida hasta entonces.

Mientras compone su ópera “Bárbara entre las llamas” (su violador la prendió fuego una vez satisfecho), Pedro Arteaga se da cuenta: el Niño con Peluca domina el mundo. Y en su sonrisa hay algo inconfundiblemente perverso...

En el Castillo de Mármol, Pamela, delirando de hambre y sufrimiento, ve visiones, imagina que un hombre negro le tiende la mano, le ofrece su ayuda. Las ratas del Castillo se apiñan bajo la alcoba del Andrógino, y en los pasillos se fragua la rebelión. Tanto el tirano como su supuesta concubina, Pamela, serán ejecutados al amanecer, como sacrificio que palíe los males del reino.

(Continuará)

sábado, 19 de septiembre de 2009

Flashback: Loco por tus huesos (Capítulo XXXVII)


Moshé Shalom improvisa en un pasillo del metro, con su violín, sobre una melodía tradicional árabe. De pronto, ante sus ojos viejos y cansados desfila una visión improbable. No, no podía ser Ilsa, se dice Moshé, actualmente sería tan vieja como él o incluso más. Y sigue tocando, pero esta vez sobre la “Marcha fúnebre” de “Götterdämmerung”, y vuelven a él el laboratorio, las jeringas, las descargas eléctricas, los instrumentos quirúrgicos, él sobre la mesa de operaciones y la bata blanca de Ilsa cayendo a sus pies, revelando sus pechos bizcos y su pubis rubio.

En la mansión de Jason Michael, todo apunta a que el célebre cantante ha muerto, o, por lo menos, éste no muestra signos de vida. Irina no puede ocultar su satisfacción, hasta el punto de olvidar lo estentóreo y desagradable de su voz y declarar que conocía a Jason desde hacía mucho tiempo y que él solía hacerle lo mismo, si no cosas peores. El problema consiste ahora en cómo deshacerse del cadáver. Gretchen, aterrorizada y avergonzada por haber logrado el mayor disfrute sexual de su vida mientras Jason moría, propone descuartizar el cuerpo y disolver los fragmentos con ácido sulfúrico, o, en su defecto, con cal viva. Irina aplaude la idea y manda al poco dispuesto Orlando en busca de herramientas. Dios quiere intervenir, pero Gretchen, pesarosa y creyéndose al borde de la muerte, cierra a besos los labios del ser que despreció.

Durante la ausencia del Doctor Misterio, Bungle suelta de nuevo a Vera y juntos hallan y desactivan la “vara de Júpiter”, al tiempo que diseñan un plan perfecto para reducir y asesinar a su captor. Ignoran que Vernon los espía desde un falso espejo.

(Continuará)

sábado, 12 de septiembre de 2009

Flashback: Loco por tus huesos (Capítulo XXXVI)


El falso inspector Tanner vive una apasionada relación sexual con Berta, su subordinada en la comisaría, quien, quizá por haber permanecido virgen hasta ahora (35 años), no repara en el color y la forma inusuales de las partes íntimas de su amante, al no conocer otras ni por referencia, y se entrega sin reservas a los intensos placeres que conoce por primera vez y que disfruta en los lugares más insólitos, desde el trabajo hasta servicios públicos, escaleras de inmuebles ajenos o cabinas de teléfono. Quizá así el impostor logre olvidar su carga, el terrible secreto de Quienes Realmente Mandan, que le ha hecho abandonar su inquietante misión sobrenatural. Sea como fuere, Berta es feliz, quizá el personaje más feliz de nuestra abigarrada galería.

En el hospital de Ciudad Centro, Pedro Arteaga, recuperado de su accidente o intento de suicidio según el informe oficial, busca por las habitaciones y encuentra a la muchacha comatosa que en otra esfera de realidad le robó la primera de sus Grandes Composiciones escritas bajo la protección del Niño con Peluca. Se llama Bárbara, y, pese a su espectacular belleza morena en sueños, la realidad de una brutal agresión y violación la ha desfigurado y despojado de su abundante cabellera negra. Pedro quisiera conocer el color de sus ojos.

Mientras, Flowers, que no se permite a sí mismo perder su dignidad pública como proxeneta, maltrata a Carla como a la que más e incluso con el especial refinamiento de quienes se ven propietarios del ser amado, y sin embargo planea publicar los poemas que ha encontrado en los bolsillos del abrigo de piel para gloria de su pupila y de sí mismo, pues por una vez se siente comprendido.

Buster, ignorante de la amenaza de muerte que pesa sobre su cabeza, permanece encerrado en su mansión, temeroso de emprender una vida para la cual nunca ha querido prepararse. Intoxicado con alcohol y drogas, ve a la Muerte despojarse de su túnica negra y revestir su osamenta con los michelines esplendorosos de Ada y las tersas redondeces amoratadas de Carla. Buster se imagina poseyéndola sobre el suelo, sintiendo cómo falanges descarnadas desgarran su espalda.

En el Castillo de Mármol, Pamela es preparada mediante ayunos, abluciones y otros extraños rituales para su muerte próxima en el patíbulo. ¿Logrará Takeshi dominar mentalmente a las ratas que han absorbido la totalidad del licuado Ops para ayudarle a evadirse, antes de que el Andrógino logre embarazarse a sí mismo y Pamela muera?

(Continuará)

viernes, 4 de septiembre de 2009

Flashback: Loco por tus huesos (Capítulo XXXV)


Nos toca abordar a un personaje borrado de los libros de historia. Nadie ha oído hasta ahora hablar del príncipe Bufalino de Mantua, músico y nigromante extraordinario del siglo XV, en algún lugar de lo que después se llamaría Italia. Bufalino sacrificó a su esposa, que llevaba un hijo ajeno (debía ser ajeno para no atraer sobre sí la maldición de las Furias, de ahí que pagara a un lacayo para seducirla y embarazarla, sin que tamañas obediencia y fidelidad evitaran su ejecución), afín de utilizar la sangre como tinta de un oscuro bermellón en la escritura de una pieza musical con la cual esperaba obtener los favores de Belcebú y el secreto del tiempo y el espacio, dominios gemelos donde un hombre libre e impávido puede desplazarse a placer si así lo desea. Durante la composición, Bufalino se aísla en su retiro de las montañas, asistiendo en los descansos de su actividad a múltiples representaciones de Commedia dell’Arte, la cual adora con morbosa pasión (si se trata de un anacronismo, tanto da: ¿acaso nuestro público va a darse cuenta?) Una noche, tras estrenar Bufalino al laúd su discordante aunque hipnótica composición, la representación se inicia como de costumbre, pero en mitad de ella irrumpe Belcebú. Desde entonces, el príncipe abandona sus responsabilidades y la orden de los Arlequines asola la comarca. Alrededor de los ombligos de sus miembros detenidos y ajusticiados puede verse asomar la cara del Maligno, como grabada a fuego. Durante los cinco siglos siguientes, existen informes de crímenes cometidos por Arlequines en distintas ciudades del mundo.

Pero no perdamos el hilo de nuestra historia:

Buster, por fin satisfecho gracias al furor desesperado de Carla, se encoña con ella de mala manera, y le ofrece sacarla de una vida de degradación que para ella representa las raíces de su arte. Flowers teme perder a su obsesión hecha mujer, y ordena a Ramón que asesine a Buster en el primer momento propicio que se presente.

En la mansión de Jason Michael tiene lugar todo un carnaval de sexo sádico y vengativo contra el cantante, bajo la mirada triste de Dios, que se plantea poner fin de una vez a toda esta creación que le salió tan fallida. Mientras Gretchen, obligada a ser dominadora, fustiga de nuevo a Jason mientras lo cabalga, Irina rompe en gritos y brincos de chimpancé eufórico. Jason palidece y pierde el sentido. Es un infarto.

(Continuará)